Tengo el poder de manejar mis pensamientos y emociones.
Estoy en control de mi respiración y la utilizo para calmar mi mente y mi cuerpo.
Aprecio cada momento presente y encuentro serenidad en la simplicidad de la vida.
Mi paz interior es inquebrantable, incluso en medio de situaciones estresantes.
Confío en mi capacidad para encontrar soluciones creativas ante cualquier obstáculo.
Suelto cualquier preocupación que esté fuera de mi control.
Soy capaz de manejar cualquier desafío que se presente en mi camino.
Mi respiración es profunda y tranquila, lo que me ayuda a relajarme instantáneamente.
Cada día, encuentro momentos de calma y paz interior.
Cada vez que inhale, estoy llenando mi cuerpo de energía renovada. Cada vez que exhale, estoy liberando el estrés y la negatividad.