Perdono libremente a quienes me han herido en el pasado.
Libero todo resentimiento y dejo ir cualquier carga que me impida perdonar.
Elijo soltar el pasado y abrazar la paz que viene con el perdón.
Reconozco que el perdón es un regalo que me doy a mí mismo.
Abro mi corazón al perdón, permitiendo que la paz y la serenidad fluyan en mi vida.
Encuentro compasión en mi corazón y perdono a aquellos que me han lastimado.
Dejo de lado cualquier deseo de venganza y elijo el camino del perdón.
Veo más allá de las acciones de los demás y reconozco su humanidad, permitiéndome perdonar.
Honro mi propio crecimiento al soltar cualquier resentimiento que pueda tener.
Al liberar el pasado, abro espacio para la paz y la sanación en mi vida.